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viernes, 27 de abril de 2012

Con los 5 Sentidos - Cupcakes de Vainilla (vestidos de gitana)

Los sentidos se deleitan: los colores más vistosos, las sevillanas de fondo, el olor del pescaito frito, el sabor del fino y toda clase de texturas y temperaturas nos invaden. Es la Feria de Abril de Sevilla. 

Sevilla está engalanada y de fiesta. La Feria empezó la noche del lunes y ya llevamos 4 días de sevillanas y rebujitos, de coches de caballo y jinetes y amazonas, de (mis favoritas) gitanas paseando por toda la ciudad.
Desde un poco antes del medio día empezamos a ver cómo se despierta la ciudad. Inicia el desfile para llegar a la Feria. El tintineo de los cascabeles de los caballos, los niños ansiosos por llegar, las galas flamencas en su máximo esplendor... Todos los caminos conducen a El Real. 

El ambiente de la ciudad me ha afectado y no me he podido resistir, excepcionalmente, os traigo una foto que no es de nuestra receta de hoy, es de una mini gitana que me encontré en la calle y posó para mí.
A que es una monada!!!
Esta es una receta clásica que no sé por qué he tardado tanto en traérosla. Se hace muy rápido, es deliciosa y os permitirá hacer cualquier tipo de decoración con ella. El frosting lo puesto con la boquilla 1M de Wilton, haciendo una espiral de fuera hacia dentro y luego elevándola. La rosa es de fondant fucsia.  Qué esperáis...
¡A la cocina!


Cupcakes de Vainilla con Frosting de Vainilla (24 cupcakes)

Ingredientes
250 grs (1 tz o 2 barras) de mantequilla a temperatura ambiente
240 grs (1 tz) de azúcar
1 cdta de extracto de vainilla
4 huevos
300 grs (2 tz) de harina
2 chdtas de levadura en polvo (polvo de hornear)
1/4 cdta de sal
60 ml (1/4 tz) de leche
Para el Frosting de Vainilla (Buttercream)
250 grs (2 barras) de mantequilla a temperatura ambiente
460 grs (4 tz) de azúcar glass
2 cdtas. de extracto de vainilla
5 cdas. de leche
Colorante (opcional)


Preparación
Calienta el horno a 180ºC (350ºF). Prepara con cápsulas de papel moldes de cupcake/magdalenas para 24 cupcakes.

Tamiza la harina con la levadura y la sal, reserva.
Con tu robot de cocina o con la batidora eléctrica de varillas, monta la mantequilla con el azúcar hasta que esté ligera y haya duplicado su volumen (3-5 minutos aproximadamente), despegando los bordes cada vez que sea necesario. Añade la vainilla y los huevos uno a uno. Despega bien los bordes para mezclar bien todo. Baja la velocidad de la batidora al mínimo y añade la harina en tres golpes, intercalando la leche, empezando y terminando con harina. Cuidado de no batir mucho, pues los cupcakes te quedarían duros. Al añadir la última parte de la harina deja que se mezcle el mínimo (unos segundos basta) y dejar de usar la batidora eléctrica y terminar de mezclar con una espátula. Echar en los moldes de cupcakes que hemos preparado, llenando 2/3 de cada cápsula y hornear por 18 minutos o hasta que al introducir un palillo éste salga limpio. 
Dejar enfriar en una rejilla durante 5 minutos y sacar los cupcakes de los moldes, si los dejas enfriar completamente dentro del molde la cápsula de papel se puede despegar del bizcocho. Dejarlos reposar hasta que estén completamente fríos.
Para hacer el frosting es necesario que la mantequilla esté acremada (textura de pomada), para ello la puedes dejar acremar a temperatura ambiente durante una hora (o media si es un día de calor) o con la batidora de varillas (incluso unos segundos en el microndas, controlando que no se derrita). Tamizamos el azúcar glas, lo incorporamos a la mantequilla acremada y lo batimos junto con todos los demás ingredientes hasta que se haga una crema suave con textura firme para poder decorar con la manga. Si está muy líquida añade azúcar glas, si está muy sólida añade leche. Si usas colorante lo puedes incorporar en este momento. Decora con la manga o directamente con una espátula. Encima puedes usar fideos de colores, grajeas, non pareils, adornos en fondant o pasta de azúcar, ¡lo que se te ocurra!
¡A comer!

viernes, 20 de abril de 2012

Aires de Feria - Layer Cake con Frosting de Naranja

Sevilla tiene un color especial, de eso no tengo dudas y cuando más brilla su color es en La Feria de Abril. 
Para los lectores de fuera de Sevilla (y de España en general), La Feria de Abril es la fiesta grande de la ciudad. 

Antes de vivir aquí había escuchado sobre ella y visto un millón de cosas en la tele, pero hasta que no se ve no se empieza a entender y hasta que no se vive no se entiende completamente. La feria empieza un lunes por la noche (se celebra dos semanas después del Domingo de Resurrección) con el pescaito frito y el encendido de las luces, y termina el domingo siguiente a medianoche con el apagado de las luces y fuegos artificiales. Hasta aquí todo más o menos normal, vamos lo que se ve en la tele... 

Mi primera Feria viviendo en Sevilla fue unas semanas después de llegar. Ese lunes del pescaito estaba en una terraza tomando café, en un barrio no céntrico, sin ser muy consiente de lo que se acercaba. Al otro lado de la calle hay una parada de bus urbano ordinaria. Cuando me fijo en ella noto que hay más gente que de costumbre. Empiezo a ver a todo el mundo engalanado: los hombres vestidos de traje de chaqueta y las mujeres con sus trajes de gitana... Luego capta mi atención una familia recién llegada a la parada. Tenían una niña pequeña que iba en su carrito con su vestido de gitana, flor y peineta en la cabeza, pulseras y collares. La hermana mayor, de unos 5 o 6 años igual que su hermanita. La madre con su vestido de gitana también y para mi sorpresa la abuela también iba con su traje de gitana. Esa estampa, aunque es muy frecuente durante la semana de Feria, me hizo comprender lo que es la Feria para Sevilla y fue el flechazo hacia mi amor por los vestidos de gitana.
El vestido de gitana es de cuerpo ajustado a la silueta femenina, muy favorecedor, con falda de volantes y combinación de colores imposibles. Es el único vestido regional que no tiene colores fijos y que va cambiando con los cambios de la moda (el largo, escote, mangas, tejido, etc). Enloquezco al salir a la calle durante los días de Feria, pues cada vestido es diferente y todos son espectaculares.


Para ir calentando motores para La Feria de Abril, que empieza el lunes por la noche, traemos un layer cake con frosting de naranja, decorado con ruffles (volantes) como mis adorados trajes de gitana. 
¡A la cocina!


Layer Cake con Frosting de Naranja


Ingredientes
250 grs (1 tz o 2 barras) de mantequilla a temperatura ambiente
240 grs (1 tz) de azúcar
1 cdta de extracto de vainilla
4 huevos
300 grs (2 tz) de harina
2 chdtas de levadura en polvo (polvo de hornear)
1/4 cdta de sal
60 ml (1/4 tz) de leche


Para el frosting
375 grs (3 barras) de mantequilla a temperatura ambiente
680 grs (1 1/2 lbs) de azúcar glas
2 cdas de piel de naranja rayada
3 cdas de zumo de naranja natural
2 cdas de leche
Colorante naranja (opcional)


Preparación

Calienta el horno a 180ºC (350ºF). Engrasa tres moldes de 15 cm (6'') de diámetro.
Tamiza la harina con la levadura y la sal, reserva.
Con tu robot de cocina o con la batidora eléctrica de varillas, monta la mantequilla con el azúcar hasta que esté ligera y haya duplicado su volumen (3-5 minutos aproximadamente), despegando los bordes cada vez que sea necesario. Añade la vainilla y los huevos uno a uno. Despega bien los bordes para mezclar bien todo. Baja la velocidad de la batidora al mínimo y añade la harina en tres golpes, intercalando la leche, empezando y terminando con harina. Cuidado de no batir mucho, pues los bizcochos te quedarían duros. Recomiendo que al añadir la última parte de la harina dejar que se mezcle el mínimo (unos segundos basta) y dejar de usar la batidora eléctrica y terminar de mezclar con una espátula. Echar en los moldes que hemos preparado y horner por 30 minutos o hasta que al introducir un palillo éste salga limpio. 
Dejar enfriar los bizcochos en una rejilla durante 5 minutos y darles la vuelta sobre la rejilla para desmoldarlos. Dejarlos reposar hasta que estén completamente fríos.
Para hacer el frosting es necesario que la mantequilla esté acremada (textura de pomada), para ello la puedes dejar acremar a temperatura ambiente durante una hora (o media si es un día de calor) o con la batidora de varillas (incluso unos segundos en el microndas, controlando que no se derrita). Tamizamos el azúcar glas, lo incorporamos a la mantequilla acremada y lo batimos junto con todos los demás ingredientes hasta que se haga una crema suave con textura firme para poder decorar con la manga. Si está muy líquida añade azúcar glas, si está muy sólida añade leche.

Con el bizcocho frío puedes montar tu layer cake. Con un cuchillo de pan o un hilo de pescar (hilo nylon) corta la parte de arriba de cada bizcocho para nivelarlos y que estén planos. Coloca uno de los bizcochos sobre el plato en que lo vas a presentar, con la parte que has cortado hacia arriba, cubre con frosting alisando la superficie completa. Coloca otro de los bizcochos, con la parte cortada hacia abajo, cubre con frosting y alisa. Repite este proceso con el tercer bizcocho colocando la parte que has cortado hacia abajo (la lisa del molde deberá ser la de más arriba). Este relleno lo puedes hacer con mermelada o cualquier crema que te guste. Coloca un poco de frosting en los laterales y la parte de arriba del pastel y alisa con una espátula lisa, retirando todo el exceso a fin de dejar una capa muy fina, que nos permita sellar las migajas de pastel, para que no nos arruinen la decoración. Llévalo a la nevera 20-30 minutos para fijar las migajas. Prepara la manga pastelera con la boquilla 124 de Wilton (yo usé la 127 que es un poco más grande, pero la ideal es la 124) o una boquilla de pétalo con un extremo estrecho y el contrario más abierto y redondo, y rellénala  con el frosting. Para hacer los ruffles o volantes coloca la manga paralela al pastel, en posición perpendicular a tu encimera, a 90º de esta,  con la parte estrecha de la boquilla hacia fuera y haz una columna de volantes, moviendo la manga de un lado a otro mientras presionas suavemente, empezando desde abajo y subiendo poco a poco, con la manga lo más pegada al pastel posible. Ve completando columnas por todo el rededor del pastel. La parte de arriba la puedes completar con volantes acostaditos sobre el pastel o  alisarlo con la espátula.
¡A comer y a bailar sevillanas!


jueves, 12 de abril de 2012

Tortura - Pastel de Limón

Creo que todos todos tenemos alguna tendencia masoquista. Al menos creo tenerla.
He huido de mi carrera, entre otras cosas, por la obligación constante de producir documentos: contratos, escritos, instancias, réplicas, contrarréplicas, informes, memorandums... Y aquí estoy yo escribiendo ahora por placer,  aunque debo admitir que a veces me resulta una tortura enfrentarme a la página en blanco.

Esa es mi razón, que no mi excusa, para no publicar con más frecuencia. Tengo un montón de recetas, proyectos y tutoriales por traeros, pero lo que antes me resultaba muy fácil (escribir) ahora se me empieza a resistir. Lo que jamás pensé que haría bien y tendría ganas de hacer, ahora lo hago: manualidades, decoraciones caseras... ¡Como cambian las cosas! Mi pasión por la cocina sigue firme, creo que con eso podremos contar siempre.

Continuando con recetas para primavera traemos hoy un pastel de limón clásico.  Lleva una base crujiente, crema de limón y una cobertura de merengue. Puede parecer complicado pero no lo es. Cada capa se prepara rápidamente y en muy poco tiempo tenemos un postre muy vistoso.

Pastel de Limón (Receta original de Joy of Baking)
Ingredientes
Para la base:
210 grs (1 1/2 tz) de harina
1/8 cucharadita de sal
125 grs (1 barra) de mantequilla a temperatura ambiente
50 grs (1/4 tz) de azúcar
1 huevo batido
Para la crema:

3 huevos
80 ml (1/3 tz) de zumo de limón (2-3 limones aprox.) 
150 grs (3/4 tz) de azúcar
62 grs (1/2 barra) de mantequilla a temperatura ambiente troceada
1 cucharada de piel de limón rayada 

Para el merengue:  
4 claras de huevo
130 grs (2/3 tz) de azúcar
1/2 cucharadita de cremor tártaro*


Preparación
En un bol mediano mezcla la harina y la sal, reserva.
Con tu batidora eléctrica suaviza la mantequilla y añade el azúcar. Una vez estén bien mezclados añade el huevo batido hasta unir, con cuidado de no sobre batir en este punto. Añadir la harina y batir hasta que se forme una bola. Sobre papel film aplasta la masa para convertirla en un disco y llévala al refrigerador por media hora.
Cuando la masa esté firme pon a calentar el horno a 205ºC (400ºF). Ten a mano un molde de base movilble de 20-23 cm (8-9 pulg.). 
Enharina una superficie lisa y estira la masa con un rodillo hasta formar un círculo de unos 28-30 cms (11-12 pulg.). Para evitar que la masa se pegue a la superficie, a medida que vayas estirando levántala y dale vueltas. Para estar segura de que la masa tiene el tamaño necesario para el molde, coloca éste sobre la masa y verifica que la masa tiene 2-3 cm (1 pulg.) más de diámetro que tu molde.
Con ayuda del rodillo levanta la masa y colócala sobre el molde (no tires de ella, pues se rompe fácilmente). Coge un trocito de masa sobrante y enharínalo, ve pasándolo por toda la superficie de la masa para lograr que ésta se pegue al molde. Pasa por encima del molde el rodillo para retirar la masa sobrante.
Coloca sobre la masa un papel de horno y sobre el papel legumbres frescas (sin ablandar) (alubias, garbanzos, lo que tengas en casa), o pesos para hornear si tienes, y hornea la masa durante 20-25 minutos o hasta que esté ligeramente dorada.
Mientras la masa se hornea preparamos la crema de limón. Mezclar en un bol mediano los huevos, azúcar y zumo de limón y colocar sobre una olla con agua hirviendo (a baño María). Mover constantemente hasta que la crema cuaje y se ponga de un tono amarillo pálido (10 minutos aprox.). Retirar del fuego y pasar por el colador. Añadir la mantequilla, mezclar bien y agregar la piel de limón rayada. Echar la crema sobre la masa horneada, alisándola por toda la superficie. Bajar la temperatura del horno a 180ºC (350ºF) y hornear durante 10 minutos. 
En un bol limpio, batir las claras hasta que empiecen las primeras burbujas. Añadir el cremor tártaro y seguir batiendo hasta que formen picos suaves. Agregar el azúcar y seguir batiendo hasta que se formen picos firmes.
Con ayuda de una cuchara o con una manga pastelera, cubrir el pastel con el merengue trabajando desde los bordes hacia dentro, haciendo picos, espirales... Llevar al horno por 10 minutos o hasta que esté dorado.
Dejar enfriar y... 
¡a comer!


Puedes guardarlo en el refrigerador cubierto con papel film durante varios días.
* El cremor tártaro o ácido tartárico es un estabilizante para las claras que puedes conseguir en tiendas de cocina online y algunos hipermercados.